La planificación diaria es anticipación, es ese gesto, esa rutina, ese habito positivo que hace que nuestra hoja de ruta para nuestro dia de trabajo sea clara.
Personalmente es algo que de manera natural, y desde el @sofá realizo todos los días al finalizar el día. A lo sumo invierto 10-12 minutos, en realizarla. Si sí, la hago el día anterior, no la hago el mismo día por la mañana.
¿Por qué realizarla el día anterior? Pues chico/a hace años, es cierto que la realizaba en el mismo día, era lo primera que hacía nada más ponerme manos a la obra. Revisar el día anterior, revisar mi calendario del día, seleccionar las tareas y preparar mi hoja de ruta del día.
Empecé a cambiar la rutina, me dije “si dejo todo preparado la tarde anterior, seguro que gano unos minutos al día y no malgasto mi @energia_alta en planificar”. Ese, en principio fué mi leitmotiv, y así lo hice, pasé de hacer la rutina de la planificación diaria en el mismo día, a realizarla el día anterior, al final de la jornada.
SORPRESA!! Madre mía!! no solo gané esos minutos al día siguiente, no solo reoriente mi @energía_alta en otras tareas con más peso…descubrí un nuevo habito, con un nuevo potencial > La planificación diaria, el día anterior.
Desde que cambié la planificación para el día antes, me ha aportada una gran cantidad de beneficios, pero sobre todo, atento/a, estas son 3 razones para hacer la planificación diaria el día antes.
1- Relajación. Seguridad
Realizar la planificación diaria el día antes es visualizar por adelantado una foto del día siguiente, es anticipación. La sensación de tener delante a las 19:30-20:00 de la tarde esa foto delante, genera tranquilidad, seguridad y relajación. El menú del día siguiente está preparado y puesto encima de la mesa, listo para abordarlo.
2. Replanificar. Urgencias e imprevistos.
Tener claro por adelantado qué hay que hacer y cuándo lo hay que hacer, te permite replanificar con más seguridad y eficacia en caso de una urgencia o imprevisto. Dominas tu hoja de ruta, controlas tu puzzle y eso te permite mover tus piezas y encajar otras piezas en tu puzzle diario.
3. El enfoque de mañana.
Planificar el día antes me permite incluir en mi enfoque de mañana (hábito que realizo desayunando) la visualización y la pre-interpretación de mis tareas y eventos. Es decir, mi radar “peina” la hoja de ruta del día, identificando donde está el peso del día y haciendo una primera interpretación de mis tareas ( qué hay detrás de cada una de ellas).
Este ejercicio es genial para “poner en situación” a tu cerebro y generar seguridad y control.
Estas son las3 razones para hacer la planificación diaria el día antes.
¿Cuándo realizas tu planificación diaria?
– José María Villarmea